lunes, 17 de julio de 2006

ESPERO QUE EN EL MILENIO

Tal vez, estos cúrsiles versos,
Tal vez, servirán para algo.
Aquellos valientes poetas,
Aquellos poetas de antaño,
No temían a la cárcel
De la mente, de su mano,
De sinrazón, de inculturas,
No se sintieron esclavos
Del que tiraniza al pueblo,
Encerrándoles en vano.

Y ahora, nada es distinto.
Mientras me fumo un cigarro,
Se ve en la televisión,
Sobreviviendo al tirano,
Otros pueblos, otras razas,
Que aun que parezcan lejanos,
Desde pantalla nos miran
Pareciendo más cercanos.

Esperando que en la tele,
El informativo amargo
De por fin una noticia:
Que el milenio traiga algo
Mucho más dulce y bonito.
Mientras sigo esperando.

Ellos parece que gritan:
“¿Es que nadie me hace caso?
¿Es que a nadie le preocupa
Que no haya nada en mi vaso?
Yo me mezco en el abismo
De secos pechos ajados.
Mientras me muero de hambre,
¿Es que miráis a otro lado?
De idéntico material
Todos hemos sido creados”:
Espero que en el milenio
Todos más nos parezcamos.
Todos tengamos lo mismo:
Nuestros hijos, bien criados
Con pechos que manan leche,
Buena comida en el plato…
Que nadie haya con frío,
En los pies, unos zapatos;
Y los ojos, más serenos,
Y los labios, más besados
Sin cadenas en la mente,
Ni en la lengua, ni en los brazos…
La palabra, se hizo hombre,
Los oídos, más humanos,
Desatándonos del miedo,
tabúes difuminados,
A través de las caricias
Que nos hagan más amados.

Mientras aquí, como inútil
En un sofá descansando,
Esperando que el milenio
Se ande pasito a paso

No hay comentarios: